ThinkGeek, una tienda que debería estar prohibida (para mí, al menos), ha empezado a vender el Kit de Consola de Juegos de 8-Bits Hydra.

La Hydra realmente es un mini-ordenador programable cuya capacidad es superior a la de los viejos Spectrum ZX, Amstrad o incluso Commodore 64. Con sus 128K de memoria y programacion en Tiny BASIC podrías, con paciencia y dedicación, replicar esos juegos de tu infancia (a lo mejor estoy asumiendo mucho de la infancia de los que me leen, hmm). Incluso incluye teclado, ratón, mando de juego y tarjeta de memoria para grabar lo que programes, así como conexión para televisión.

Sólo para frikis consumados.

Si lo tuyo es más jugar que programar siempre puedes recordar esos juegos de antaño con los llaveros de mando de Atari con juegos incorporados:

Si eres más de Sega existe la PlayPal, una consola de dudosa procedencia que en un empaque de aspecto mutante similar a un gameboy logra apilar 20 juegos de la época de 8-bits de la Sony Sega Master System y Game Gear:

Ah, y recuerda ponerte el Feed de RSS de ThinkGeek en tu lector de RSS. Porque el dinero se hizo para gastarlo.

Tal vez un indicador de que has caído en el lado Apple de la fuerza (no diré si es el claro o el oscuro, que para todo hay opiniones) es que deja de parecerte extraño que la gente documente el primer «desempaquetado» de un producto nuevo.

Algo que podría considerarse estúpido o trivial en el mundo de Mac es una noticia. Y si no has tenido o abierto un mac no es fácil de entender (y se presta a la burla fácil, porque parece TAN de fanáticos).

La realidad, sin embargo, es más sutil. La razón por la cual abrir un producto de Apple es noticia es porque Apple empeña tanta ingeniería y diseño en estos empaques como los que dedica a las máquinas y por los que es famoso.

La calidad del empaque (si es cartón suele ser laminado, con ilustración a color y diseño minimalista, si no es cartón suele ser acrílico transparente), la forma en que se abre la caja que suele ir descubriendo las partes. Ver que no hay detalle pequeño que se no se considere indigno de diseño como el que las etiquetas que sellan los sobres suelen tener el logo impreso o que los cables son hechos a medida con conectores y cubierta a juego. Las cubiertas de los conectores, los folletos de instrucciones.

El problema con Apple es que no es posible ignorar esa sensación de lujuria tecnológica que produce, ese desperdicio de diseño que tanto cuesta justificar y del que da un poco de vergüenza hablar abiertamente (como la que me está dando ahora). Esa sensación de derroche que sientes.

Esa decadencia de saber que aunque un carton reciclado marrón con impresión monocromática hubiera sido igual de funcional, estás disfrutando de algo totalmente inútil cuya existencia sólo se justifica por la estética.

Me ha dado por comentar esto en parte por romper una lanza y ponerlo con todas las letras y porque están ya empezado a surgir comentarios sobre esta misma experiencia sucediendo con los iPhones.

Una sola frase me lo ha recordado en una reseña de Steven Levy para MSNBC:

Apple [con el iPhone] ha logrado , como ya lo había hecho con los reproductores de MP3, que hasta sus más estéticos competidores parezcan diseñados por el Gobierno Soviético.

Sí, somos frívolos, pero nuestros portátiles no vienen con diecisiete pegatinas de colores.


Es el fenómeno según el cual la gente con pocos conocimientos sistemáticamente piensa que sabe más que otros mucho mejor informados. A lo largo de 4 estudios, los autores descubrieron que los participantes con bajas calificaciones en las pruebas de humor, gramática y lógica solían sobreestimar desproporcionadamente su desempeño y habilidad. Simultáneamente, la gente con conocimientos reales tendía a subestimar su competencia.

También en la tradicional versión a medias (y en este caso especialmente mediocre) de la Wikipedia en Español.

Esto me recuerda (y creo que puede tener relación) al Efecto del Lago Wobegon:

Es la tendencia humana a sobreestimar los logros propios en relación a los de los demás. En encuestas a conductores Ola Svenson encontró, en 1981, que el 80% de los encuestados se calificaban a sí mismos en el 30% superior con respecto al resto.

Seré el primero en decirlo, para sacarlo del paso: Yo probablemente caigo en este efecto en ocasiones.

Visto en casa de Kottke.

Todo esto es parte de los sesgos cognitivos de los que ojalá se hablara más en esta era de Internet y Blogs, dónde todos pensamos que tenemos el conocimiento y la autoridad para criticar.

Que gracia. Mientras que el resto de Europa tiene a Nicole Kidman promocionando la Nintendo DS y el Brain Training aquí en España tenemos a Sole (la incombustible Amparo Baró), de 7 vidas.

«Spain is different». Sí, Señor.

Aunque no me molestaría ver más a Nicole la realidad es que Amparo probablemente hace un mensaje mas entrañable, realista y simpático. Lo único que no me gusta es la implicación (especialmente en los últimos) que no es ella, sino su personaje de Sole, quien está usando la consola.

Este es un excelente vídeo completo del programa Nova, de PBS, «Los Reyes del Camuflaje» donde estos animales de tres corazones y sangre azul presumen su maleabilidad de colores y formas. Desde la forma coralina con espinas y pinchos hasta el hipnótico efecto del reflejo del agua (que me recuerda a los extraterrestres acuáticos de Abyss).

Aquí el enlace al vídeo en Google, que este vale la pena verlo en grande.

En los últimos años las sepias se han ido poniendo de moda como mascotas de acuario en el Reino Unido, en vez de los peces tradicionales, por su inteligencia y por diferenciarse de lo común. Se supone que aprenden a conocer a sus dueños y pueden aprender trucos y reconocer cuando le han enseñado a sus cuidadores que quieren comida.

Un vídeo de sepias en cautividad en una pecera:

No se si agradecer o lamentar que no existan versiones gigantes, como de los calamares.

Es una costumbre común en los bancos, pero es tabú en el supermercado.

Hacer colas es una de las maldiciones de la sociedad moderna. La costumbre de hacer cola es tan parte de la cultura actual que incluso es común ver que la gente hace cola cuando no hace falta hacerla (cuando se llama por número o nombre o se tiene cita por horas). Nos es tan normal hacer colas que si en un sitio vemos dos taquillas, una con tres personas y otra vacía, lo normal es asumir que hay que hacer la cola y la otra está cerrada.

Mucho dinero se ha invertido en intentar resolver el problema de las colas. Por un lado no es posible tener suficiente gente atendiendo como para no tener cola y por otro está el tiempo máximo que una persona está dispuesta a esperar.

El NYTimes tiene un artículo muy interesante de cómo un supermercado especializado, Whole Foods, está experimentando adoptar colas similares a las de los bancos. En este sistema hay una sola cola larga que serpentea y se va asignando la gente a la siguiente caja libre.

Enfrentándose al principio a un duro rechazo han podido, siendo persistentes, demostrar la eficacia del sistema.

The longer the line, the shorter the wait.

Los bancos han utilizado el mismo sistema por décadas pero los supermercados temen por la pérdida de clientes. Es menos probable, al fin y al cabo, que alguien decida mañana ir a un banco diferente si el de hoy tenía mucha cola.

Las ventajas no son tan obvias: Lo más importante es que no hay «colas lentas»; el efecto que un sólo cliente que tenga tickets de descuento o pague con monedas puede tener en el resto de la gente. Asimismo no hay saturación en cajas «especializadas» (como la caja «exprés»). En una cola única los clientes van avanzando a la siguiente caja disponible y abrir cajas nuevas si se necesita no causa un caos al todos intentar ser el primero en la nueva cola.

Un comentario interesante es cómo la percepción del tiempo afecta la reacción a la espera:

«En nuestra cabeza tenemos un reloj interno que es exacto sólo durante los tres primeros minutos. A partir de ese momento el tiempo empieza a expandirse desproporcionalmente. Si alguien ha esperado durante 4.5 minutos y le preguntas, dirá que lleva 15.»

De vez en cuando surge algo en Internet que como llevamos haciéndolo desde hace tiempo nunca se nos había ocurrido comentar. Esta es una de esas.

Al menos en siete sitios hoy he leído como es posible utilizar una pila C donde se requiere una pila D y como extraer las seis pseudo-pilas AAA que hay dentro de una de 9V.

Como nunca se sabe quien más pueda encontrarlo interesante lo replicamos.

Visto por última vez en Lifehack.org que repite lo mismo que otros sitios:

Cómo utilizar baterías tipo C donde se requieren tipo D:

El truco, claro, está en utilizar unas monedas para completar el espacio faltante. Con monedas aún más pequeñas se puede hacer lo mismo con baterías AAA a AA.

Cómo extraer baterías tipo AAA de una batería de 9V:


9 Volt Battery Hack! You’ll Be Suprised…The funniest home videos are here

El truco es destripar la pila, que en su interior tiene 6 baterías de tamaño casi idéntico a las AAA y de 1.5V (9V / 6 = 1.5V)

Lo que me hace gracia de ambos tips no es sólo la cobertura que está recibiendo y los comentarios de sorpresa donde se pone (que no muestran sino cómo cada vez hay mas separación con la parte técnica) sino que, en mi experiencia, tener pilas de 9V es bastante menos común que tener tipo AAA y que las pilas C se usan aún menos que las D.

Entre los anuncios del iPhone, enterrado en la publicidad, hay una pequeña nota que dice que el iPhone soporta el marcado a teléfonos a partir de URLs en páginas web.

La nota pasa desapercibida porque no es algo glamoroso u obviamente vendible. El interés, sin embargo, es grande para los sitios como Google, Lanetro, Metrópoli, Páginas Amarillas, QDQ y cualquier otro que gane dinero enlazando clientes con proveedores de servicios. La posibilidad de dar resultados que en un clic enlazan al usuario con su búsqueda. La posibilidad de cobrar por clic en teléfono. De enviar a imprimir un formulario de una página web directamente por fax.

Internet tradicionalmente ha sido un medio separado del teléfono. Paralelo y complementario pero desde los tiempos de los módems si se usan servicios en línea es porque no se usa el teléfono. El que ningún teléfono móvil hasta ahora haya sabido aprovechar esta interconexión entre sistemas no ha ayudado. Pelochos o Afromen por Internet

Pues bien, para utilizar URLs de teléfono en el iPhone Apple no está realmente inventando algo nuevo sino adoptando un formato de URL que lleva 7 años ignorado, recogiendo polvo como estándar aceptado de la IETF: El RFC2806.

Este estándar, propuesto por Nokia y autorizado por la IETF, cubre URLs del tipo «tel:» , «fax:» y «modem:» junto a números formateados con el estándar E.164.

tel: Conexiones teléfonicas de voz normales. Soporta extensiones para marcar tonos y pausas y reconoce la existencia de teléfonos escritos con letras. También contempla extensiones futuras.

Ejemplos:
tel:+358-555-1234567
tel:+358-555-1234567;postd=pp22
tel:0w003585551234567;phone-context=+3585551234
tel:+1234567890;phone-context=+1234;vnd.company.option=vodafone

fax: El fax, ese celacanto digital continúa resistiendo los embates de la modernidad recibiendo su propio URL (notemos que el «telex» no recibe uno). Es similar al «tel:» pero contempla también, además de la posibilidad subdirecciones ISDN (RDSI), subdirecciones específicas de fax (T-33)

Ejemplos:
fax:+358.555.1234567
fax:+358-555-1234567;postd=pp22

(aquí se puede ver que fax: y tel: son prácticamente idénticos)

modem: Tal vez el más complejo, por referirse a una tecnología creada cuando Internet era una forma de poder seguir enviando misiles mientras te destrozaban el país y cuando los ordenadores se construían con arcilla, huesos y una buena cantidad de cánticos. El URL incluye, además de los parámetros de «tel:» especificaciones de protocolo (bits y paridad, los famosos 7-1-E ó 8-N-1 con los que algunos aún tenemos pesadillas), de estándar de comunicaciones (V32, V90, etc.) así como el fabricante de la variante del estándar (eran tiempos mucho mas divertidos, definitivamente).

Ejemplo:
modem:+3585551234567;type=v32b?7e1;type=v110

Obviamente, esto puede abrir una caja de sorpresas peor que los popups de publicidad actuales. Por JavaScript es muy fácil cambiar el comportamiento normal de un navegador y abrir URLs en el fondo, lo cual sería catastrófico con estos. Ojalá que el iPhone contenga alguna forma de controlar que no puedan ejecutarse sin autorización expresa porque, si no, el ataque puede ser descomunal.

NOTA (2008-11-24): Bravo, Apple! Has dejado que un bug explotando este agujero exista y se mantenga sin cerrar por más de un año. Luego no te extrañará que las hordas antiapplefanboys usen estas cosas como argumentos para decir que es preferible Nokia con sus virus de bluetooth o Android con sus SMS autoejecutables de la muerte. A ti, Apple, no se te perdonan las mismas cosas, deberías saberlo.

Mientras tanto seguimos sin saber cual es la situación del iPhone en España. Si lo venderá telefónica o no. Tampoco sabemos cuándo y en qué diferirá de la oferta de EE.UU., si es que lo hace en algo. Sólo tenemos especulación y rumoreo (#1, #2, #3, #4).